Costumbres, tradición, gastronomía, trabajos rurales, vida vaqueira, saber popular
 

"El número de hablantes de una lengua no tiene nada que ver con sus características estructurales. Lo único que se puede decir con seguridad es que cuantos más hablantes tenga una lengua, más diversidad de hablas encontraremos dentro de ella. Cada una de las variantes será en sí lo suficientemente rica y poderosa como para servir a los fines para los que se utilice".
(Juan Carlos Moreno Cabrara)

Cultura popular asturiana (III):
situación actual del asturiano

Extracto de los planteamientos
y cuestiones discutidas
en la mesa redonda
del Ateneo La Palmera,
28/02/07
Xulio Concepción Suárez

Situación actual del asturiano:
la discutida institucionalización

(la oficialidá).

•  Los tiempos cambian, también para las lenguas: cambiaron también para el romance castellano en unos tiempos remotos en que no estaba bien visto como lengua escrita, para las cosas sacras especialmente. A juzgar por otras CC. AA, el paso de dialecto histórico a la consideración de lengua regional es voz creciente en las calles de las ciudades, y en contextos estudiantiles diversos. Bien realizado el proceso, lejos de cualquier politización, pudiera resultar positivo para la cultura asturiana en su conjunto: en otro caso, desaparecerán varios milenos del cultura popular. Una lengua asturiana institucionalizada tendría consecuencias comenzando por el entorno laboral: los catalanes, vascos, gallegos, -como se dijo- pueden venir a hacer oposiciones a Asturias, sin prueba específica alguna en la lengua de la Comunidad; en cambio, los asturinos, si van a otras regiones, tienen que hacer una prueba específica de la lengua regional: catalán, gallego, vasco.

•  El respeto a la lengua: algo más que palabras huecas. Otra cuestión sería que ese proceso de institucionalización (la lengua cooficial, la oficialidad) se lleve a cabo mal; y se hizo mal; las normas se elaboraron exlusivamente desde unos despachos de moqueta, con un modelo de asturiano refinado y con estructuras castellanas. Es decir, el peligro está en que la oficialidad se hiciera - como se intenta hacer- al margen o en contra de los asturianos: una selección lingüística tendenciosa, centraliega, manipulada, al servicio de intereses personales, económicos, electoralistas.... Sólo se tuvo en cuenta el número de hablantes de las zonas centrales. Se despreció el dato geográfico real: la gran mayoría de Asturias es rural (y de montaña, incluso, o de mar), por mucho que la población se concentre en tres ciudades mayores, o poco más..

•  Un ejemplo al azar: la desaparición de la ts > ch en el Diccionariu de la Llingua Asturiana . Por citar un caso más de intención centraliega tradicional (la actitud cortesana, ya en época medieval) el diccionariu normativu terminó por borrar la representación gráfica de esa tse (che) vaqueira más característica de los pueblos de montaña (transformada del tseísmo en cheísmo hoy por los propios lugareños). De esta forma, mientras en los pueblos se sigue articulando con claridad chamar, chegu, chamarga ... (antes, tsamar, tsegu, tsamarga ), el Diccionariu impone por decreto las formas más finas: llamar, llagu, llamarga .

•  Entre el tseísmo, el cheísmo y el lleísmo . La che (el cheísmo sustituto del antiguo tseísmo , como evolución normal entre los hablantes asturianos), parece que no resuena fina a ciertos oídos, y así la borran por decreto de los diccionarios. El cheísmo no es aceptado por ciertas instituciones: no sería políticamente correcto . En el Diccionariu ya se impuso por decreto el lleísmu , eliminando la articulación milenaria de los vaqueiros de alzada, y de tantos otros vaqueros asturianos.

•  El cheísmo , en cambio, está bien aceptado en otras lenguas regionales : es el resultado normal, prestigiado, usual, en l a lengua catalana (Xavi) , en la lengua galega ( chamar, chorar, chegar ...) , en la lengua vasca ( Etxebarría ) , en lengua aragonesa ( chunta ) en la lengua italiana ( cinco, cinquecento. ..)... Las grafías del cheísmo son diferentes: el sonido muy parecido. Así lo decidieron sus hablantes, y nadie se avergüenza por ello.

•  La l.l y el lleísmo frente al cheísmo . La manipulación lingüística fue poco disimulada: al principio se decía que la ts vaqueira sería grafiada con l.l, ll , ll (con dos puntinos debaxo ), pero esto sólo era la forma subliminar de que los asturianos nos olvidáramos de los dos puntinos y nos quedáramos sólo con la ll ( llamarga, llagüezos, llagu. .., tal como aparecen en el Diccionariu normativu hoy). Es más, la ts vaqueira ( con esos dos puntinos ) ni existe en la informática más popularizada: imposible para el pueblo (el usuario habitual) escribirla con los procesadores de texto al alcance de la mayoría. No está al alcance de los ususarios: tal vez, precisamente, para que no se use, claro.

•  En todo caso, con cualquier grafía que no sea diferencial (la ts de siempre, o la che del cheísmo), los más jóvenes, los que aprenden de nuevo el asturiano, acabarán por confundir l.l , ll , con ll normal: justo lo que pretendían los dirigentes centraliegos. Del otro lado, hasta las cosas serían más sencillas, como fueron siempre y como están en otras lenguas: tanto los grafemas ts como ch ya existen por separado en el sistema gráfico, de forma que no habría que inventarse signo alguno. Se utilzarían juntos los que ya usamos todos por separado (como el resto de las lenguas). Como la misma ch castellana, galega, aragonesa, como la tx vasca, la cc italiana. Es la forma más económica y popularizada.

•  La razón de esta manipulación gráfica parece evidente: la tse vaqueira, como sonido articulatorio verdaderamente diferencial, no resultaba rentable (comercial, políticamente correcto) para extender de forma rápida un asturiano fácil, parecido al castellano. Y los hablantes asturianos de los pueblos ya nunca van a encontrar escritas las sabrosas palabras que pronuncian y seguirán pronunciando por muchos lustros: chábanas, chabores, chameras, chadrar, chagar, chagartesa, chaparea, chavar, cheu, chuna... Sino que tendrán que leer y escribir llábanes, llabores, llagar, llagartesa, llaparea, llavar, lleu, lluna... Tampoco en esto el diccionariu escuchó la voz del pueblo, una vez más.

•  El caso de la metafonía . Algo parecido puede decirse del cierre de las vocales tónicas propias de buena parte de Asturias en el pasado (hasta en Cabrales hubo metafonía). Hoy es fenómeno muy vivo en Lena, Aller, Riosa, Morcín, parte de Quirós..., incluso en colegios, institutos... Es el caso de pirru, guetu, piquinu, cuintu ..., tan espontáneo en los pueblos. Y la prueba de su fuerza regional es evidente: hasta en la tele dicen L'Angliru (no L'Angleru). Fue siempre con metafonía : esa palabra, como da mucho dinero y tiene muchos hablantes, no la pudieron eliminar de las carreteras, mapas...; las que no dan dinero se eliminan por rurales, rústicas, poco urbanitas, arcaísmos, ruralismos (aún nos se libra el asturiano , de momento, del centralismo cortesano de siempre).

•  La toponimia oficial . Algo más respetuosa se hizo recientemente la toponimia en los pueblos, una vez que la Oficina de Política Llingüística sigue otro camino un poco más ecológico en este punto. En el caso de Lena, por ejemplo, respetaron en parte los nombres asturianos escuchados a los falantes: La Vega'l Ciigu, Muñón Fondiru, Chanos de Somerón, Santandrés, Malveo, Casorvía, Zurea, Xomezana Baxo, Xomezana Riba. ..

•  Algo ye algo. No obstante, por el camino impuesto en el Diccionario de la Academia, se acabará diciendo y escribiendo (ya se está leyendo en los mapas y libros de rutas) La Pena Llago , completamente fuera de lugar: les suena mal La Pena Chago, Chandicuandia ... Incluso se lee ya * La Pena Llegu (un caso más de contaminación lingüística sobre el entorno lenense). La contaminación verbal (acústica, visual) existe también: está a la vista. Como se llega a decir *La Pola Llena: Tsena, en la voz oral, o en toponimia, como Regueretsena, en La Frecha (la reguera del río Tsena): pero llena (adjetivo) nada tiene que ver con Tsena (hoy Chena, con cheísmo, ya para muchos jóvenes que saborean la palabra, aunque sea sin la articulación de los mayores).

•  Atención especial habría que dedicar al asturiano de los vaqueiros de alzada y de tantos otros vaqueiros, vaqueros y pastores por las diversas brañas y mayadas regionales, entre las olas del mar y las crestas cimeras de las camperas. O el asturiano más occidental da fala . Se leen con gusto algunas interesantes páginas web elaboradas por descendientes de estos güelos y güelas de ahora, algunos desparecidos ya: jóvenes (y ya algo menos jóvenes) asoleyan en la red su lengua y sus costumbres desde sus conceyos de origen, o desde otras regiones mucho más allá de los altos de Somiedo o del Pontón. También el asturiano de pastores, vaqueiros, tixileiros ..., ya se esparce por la red camino del futuro.

En defensa de las lenguas:
Camilo José Cela

"Como amante de la lengua, de las lenguas, de todas las lenguas..., preconizo que juguemos a sumar y no a restar, que apostemos al alza y no a la baja, que defendamos la libertad de las lenguas y sus hablantes, soñemos con la igualdad de propósitos y troquemos la fraternidad de los juegos florales y los discursos de artificios y su escenografía caduca e inoperante, por la justicia de la implacable erosión semántica, esa ilusión que acabaría perfeccionando al hombre en paz. Sí. No usemos la lengua para la guerra, y menos para la guerra de las lenguas, sino para la paz, y sobre todo para la paz entre las lenguas. De la defensa de la lengua, de todas las lenguas, sale su fortaleza, y en su cultivo literario se fundamenta su auge y su elástica y elegante vigencia".

Ver artículo I: conceptos y términos.

Ver artículo II: el asturiano, lengua romance

Ver artículo IV: conclusiones

Volver a ÍNDICE de contenidos